Diablos de estanquillos


Para Yuris Nórido y José Roberto Loo Vázquez, porque en mis pensamientos esta nació como una Micro-crónica 

Dan las 10 de la mañana en el parque Céspedes de Trinidad, y una docena de ancianos se conglomeran en una pequeña oficina de correo ubicada al lado del telepunto municipal de ETECSA. Todos quieren llegar primero, no pueden aceptar la idea de quedarse sin la prensa del día. El camión del periódico, aunque tarde otra vez, ya aparcó en el mismo centro de la ciudad. Una señora de amplias proporciones vocifera el inicio de la venta, si otro público que ellos.

A los ojos de los demás parece una reunión oficial de antiguos cadetes, o la celebración de un cumpleaños colectivo en el círculo de abuelos muncipal, pero la verdad es que un oficio fortuito los ha llevado a reunirse todos los días en ese lugar, y ni se acuerdan desde cuando: compran los ejemplares, los echan en una jaba de guano y salen por la ciudad a revenderlos. Tienen el andar sereno, el alma segura de que ese es el incentivo necesario para vivir sus últimos días.


Yo los miro y me da gracia. El ímpetu que le transfieren a ese oficio les enciende la mirada. Gustan de saber que aun después de mucho sol y tierra en sus zapatos, su labor de informantes por cuenta propia sirve cuando menos, para aliviar el vacío informativo de tantos establecimientos de correo. Uno puede, cuando se les acerca, encontrar las perdidas Bohemias, las siempre escurridizas La Calle del medio, Lucas en Vivo, etc., esos periódicos del día que no llegan a los hogares o se empolvan en un rincón de los estanquillos… y todo eso, casi siempre, por 1 peso cubano. 

La cola crece y aparecen todo tipo de personalidades: los temperamentales, que velan porque nadie acapare el puesto de nadie “oye te estas colando, jovencito”; los buenos comerciantes, que te ven y preguntan al momento qué quieres para buscártelo “oiga muchacho ¿usted quiere algo en específico? Dame el dinero y…”; los mustios, que responden con angustia cuando tienen el último puesto “Posiblemente ni alcancemos nada”; y los jaraneros, que sin importar ni el bullicio ni la eternidad del momento acuden a cuánto chiste aparezca “linda, con esos brazos podemos echar un pulso”.

Un amigo mío tuvo que correr detrás de uno que lo timó. Después de caminar varias cuadras se dio cuenta que el compañero de avanzada edad le había vendido un ejemplar con dos días de retraso.

Lo tengo decidido: cuando yo sea viejo quiero ser revendedor de periódicos, de esos que pelean en la cola por no quedarse sin ninguno, de esos que inventan recursos ingeniosos para pescar compradores, de esos que rara vez tienen una expresión de infelicidad en sus rostros, y sonríen cuando venden, y llegan a ser, incluso, vendedores inconformes.

Este viernes, en la terminal de Ómnibus de Santa Clara, un señor entrado en muchos, muchos años, se acercó a mí a venderme un periódico. Le dije: no tengo menudo, y el hombre, dejando claro su propósito, replicó. Volví a negar.  Se marchó. Siempre pierdo contra mis remordimientos y termino por compadecerme hasta del diablo, por eso me di a la tarea de escarbar dentro de la billetera en busca de una enmienda para mi error. Me le acerqué, pedí disculpas “imagínese, en la calle, todo cuesta dinero…”  y pregunté si no tenía un par de periódicos por 2 pesos. El anciano me miró, se rascó la cabeza y respondió: “Ay mi niño, lo que tengo es la Gaceta Oficial que cuesta 5; vaya, porque me caíste bien te la dejo en 2.”

Comentarios

  1. primero algo que me resulta curioso, el principal espacio público de Santiago de Cuba se llama Parque Céspedes... nunca había leído una crónica dedicada a los (re)vendedores de periódicos, MUY buena, solo lamento (de los revendedores, no de la crónica) es que hoy solo se limiten a anunciar el nombre del periódico u otra publicación, ya no anuncian la noticia de la edición, esa de primera plana que nos enseñan en las facultades que vende un periódico, será porque ya no se hace ese tipo de noticia? será que los "semanarios" han matado la noticia de primera plana? será que los periódicos ya no venden noticias? Interesante.... Esas personas que recorren las calles con los periódicos y revistas en sus jabas existen en cualquier lugar, es verdad que acaparan las colas, las repletan, las inundan… se apoderan de ellas y utilizan cualquier estrategia de zorros viejos para acaparar las publicaciones. Te cuento algo que me pasó por inculto, en una ocasión me enfrenté a uno de esos zorros viejos para comprar no me acuerdo qué revista y al preguntar el precio me dijo “son cinco reales”, desconociendo cuánto era un real pregunté. Su respuesta fue un sonido que aquí en Santiago le decimos “freír un huevo”, ese sonido que hacemos con la boca y que significa desdén…. Al final yo supuse que era 5 pesos y no 50 centavos (antes una revista podía costar eso, hace ya más de una década… jajaja) y el viejo cabrón no me dio el vuelto y yo de bobo ni sabía que me debía dar 4.50 pesos…. De todas formas, cuando yo sea viejo no sé que haré, pero definitivamente no tengo alma para vender periódicos, buen tema para escribir un post jajaja

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    1. Me encantan esas coincidencias, pero te puedo decir que con tantos parques en las ciudades nuestras, y ese ímpetu que sufrieron de ponerles nombres de héroes históricos, deben haber unos cuántos repetidos... oye pues tienes razón, eso de que ya no venden las noticas... se ha perdido esa imagen pintorezca de de los títulares en boca de vendedores callejeros, siempre viejos, mejor que ninnos... tu te imaginas a uno de estos anciandos vociferando en plena calle "Cumplen (no sobrecumplen) del plan de papas en la UBPC... " no llama la atención la verdad jejejeje.. respecto al sennor que te timó a ti también,jejeje es una jestra de que son unos diablos de estanquillos, yo he leído crónicas muy melosas, y muy rosas sobre ellos, de corte muy político, tu sabes... en realidad son unos pícaros jejejeje el de mi anécdota si me lo quería vender en 5 pesos, nada de 50 centavos, eso es agua pasada jejeje un barazo Viste la dedicatoria?

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    2. jajajajaq....así que anunciar sobrecumplen...!!!! está bueno eso.... sí vi la dedicatoria, gracias, de verdad...

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  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  3. Luis Orlando, siempre he pensado que cuando sea vieja -y créeme que me falta muchísimo menos que a ti - quisiera verme rodeada de libros, una biblioteca, una librería o un simple estanquillo de periódicos sería perfecto para mí. Lo de vender periódicos ya es harina de otro costal pues no creo tener talento para eso...creo que no vendo ni el diamante del Capitolio ni a cinco centavos jajaja...
    Tienes muy buen ojo para la crónica. Como siempre, me ha sido muy agradable leer tu post. Saludos!

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    1. Igual que mi abuela materna, que se volvió una lectora voraz en su vejez, consume hasta los clásicos y, aunque no está rodeada, así, como uno se imagina, siempre se las arregla para cponseguir uno, así estaremos entonces nosotros, rodeados de libros, y en mi caso de periódicos, que me ancantan... gracias una vez más por pasarte por aquí, por tu halagos, y por haber convertido ya en una lectora asidua... Saludos!

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  4. Muy simpático. Y muchas gracias por la dedicatoria, no sé cómo no lo leí en su día... Un abrazo.

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    1. Ah! yo imaginé que no lo habías visto jejejeje, igual, no hay de que agradecer, el problema es que cuando me senté dije: y si hago algo parecido a lo que hace Yuris, o Jose Roberto? pero que va, no me salió, aun así sentí inspiración de ustedes...

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  5. Pues si mi amigo Luis muy interesante tu escrito,tambien en el coreo se hacen sus buenas colas,sabes que un dia fui a escribirle a mi famila aqui en alemania y un senor Mayor me miraba mucho hasta que yo no pude aguantar mi curiosidad y despacito me le acerque y le pregunte abuelo le sucede algo,tiene algun problema,y me miro con unos ojos que me dejaron con la duda,al cabo de unos minutos al ver que no habia obtenido respuestas a mis preguntas pues me gire de nuevo a mi Cola del Internet ja y que colaa se le va a uno el dia en eso,cuando senti que me tocaban y me daban un menudito en la mano para que le hiciera el favor de comprarles unos ejemplares ya que habian reducido el Numero por personas y para el era un gran problema,en fin jaja me puse en la Cola de los periodicos como una mas jaja unos comentaban eh y esta de donde salio,otro me dijo jaja que me estaba colando,jaja otro que los jovenes no respetaban a los mayores y el senor que me pidio que le hiciera el favor pues a dar explicaciones ...senores Ella anda conmigo jajaja que rollo,al final sali con mis periodicos se los di al senor y feliz por ayudar a una persona ya que su manera de buscarse la vida es esa porque segun el lo que le dan por su chequera es poco,y en el fondo me da tristeza el pensar que a esa edad ya es para que uno descanse y no para andar con el estres de que no nos da para vivir jajajaj aunque hay alguno que te dan unas enredas del carajo jajaja y a veces no tienen cambio jajaj buen escrito Luia,escribe y publica que yo te comento jajaj saludos desde alemania

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